Nuevo almacenamiento Vizcaya
Medio ambiente
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Nuevo almacenamiento Vizcaya
Impacto amiental
Estudio de impacto ambiental de almacenamiento de crudo de CLH
BlacktoGreen recibió el encargo por parte de CLH de realizar el Estudio de Impacto Ambiental (EsIA) de las nuevas instalaciones de Almacenamiento planteadas en la zona de El Calero (Santurce, Vizcaya). El objetivo del encargo era la identificación y evaluación de los impactos generados por el conjunto de elementos asociados al proyecto: la propia instalación de almacenamiento, el poliducto de conexión de ésta con el puerto y el correspondiente a su conexión con la refinería de Petronor, y la estación de bombeo prevista en el puerto; además de la afección temporal a algunas infraestructuras de la zona.
La reordenación urbana del municipio de Santurce llevó a una reclasificación del uso de los terrenos en los que se ubicaban las antiguas instalaciones de almacenamiento. Esto, unido al fin de la autorización concedida, supuso el traslado de las mismas fuera de zona urbana ante la necesidad de seguir garantizando el abastecimiento y la distribución de productos petrolíferos en su zona de influencia.
El diseño del nuevo parque, de 208.800 m3 de capacidad, incluía tecnologías consideradas como Mejores Técnicas Disponibles para evitar la fuga de hidrocarburos, garantizándose por primera vez un nivel “cero” de Contaminación de suelos a lo largo de toda la vida útil de la instalación. El EsIA se enfrentó a la contaminación potencial de acuíferos que emanaban aguas abajo en la ladera existente, el riesgo intrínseco de la instalación y el conflicto social de la ubicación. IIMA realizó el estudio abordando por separado la instalación de almacenamiento, los ductos y la estación de bombeo a ubicar en el puerto, debido a la distinta tipología de afecciones, resultando finalmente diferencias también en el procedimiento de tramitación. El estudio de alternativas consideró como determinante la cercanía al puerto y a la refinería de Petronor, al margen del resto de condicionantes técnicos, administrativos y ambientales.
El análisis de impactos determinó la ausencia de afecciones permanentes reseñables debidas a los ductos y, en el caso de la estación de bombeo, se destacó el riesgo de contaminación acústica. Respecto a la instalación de almacenamiento, se evaluó especialmente su incidencia sobre el paisaje, empleando para ello técnicas de simulación, muy útiles para la toma de decisiones. El conjunto del proyecto planteaba un impacto social, que a pesar de la Generación de puestos de trabajo, se tornó en cierto rechazo por la peligrosidad que se atribuía a este tipo de instalaciones. IIMA consideró los resultados obtenidos en los procesos de consulta en la elaboración un conjunto de medidas correctoras encaminadas a la minimización de los impactos identificados. El resultado fue un éxito, en tanto que se consiguió compatibilizar el proyecto con las demandas de la administración y población afectada. Gracias a ello, el promotor confió también en IIMA para la vigilancia durante las obras del cumplimiento de los condicionantes ambientales del proyecto.
La reordenación urbana del municipio de Santurce llevó a una reclasificación del uso de los terrenos en los que se ubicaban las antiguas instalaciones de almacenamiento. Esto, unido al fin de la autorización concedida, supuso el traslado de las mismas fuera de zona urbana ante la necesidad de seguir garantizando el abastecimiento y la distribución de productos petrolíferos en su zona de influencia.
El diseño del nuevo parque, de 208.800 m3 de capacidad, incluía tecnologías consideradas como Mejores Técnicas Disponibles para evitar la fuga de hidrocarburos, garantizándose por primera vez un nivel “cero” de Contaminación de suelos a lo largo de toda la vida útil de la instalación. El EsIA se enfrentó a la contaminación potencial de acuíferos que emanaban aguas abajo en la ladera existente, el riesgo intrínseco de la instalación y el conflicto social de la ubicación. IIMA realizó el estudio abordando por separado la instalación de almacenamiento, los ductos y la estación de bombeo a ubicar en el puerto, debido a la distinta tipología de afecciones, resultando finalmente diferencias también en el procedimiento de tramitación. El estudio de alternativas consideró como determinante la cercanía al puerto y a la refinería de Petronor, al margen del resto de condicionantes técnicos, administrativos y ambientales.
El análisis de impactos determinó la ausencia de afecciones permanentes reseñables debidas a los ductos y, en el caso de la estación de bombeo, se destacó el riesgo de contaminación acústica. Respecto a la instalación de almacenamiento, se evaluó especialmente su incidencia sobre el paisaje, empleando para ello técnicas de simulación, muy útiles para la toma de decisiones. El conjunto del proyecto planteaba un impacto social, que a pesar de la Generación de puestos de trabajo, se tornó en cierto rechazo por la peligrosidad que se atribuía a este tipo de instalaciones. IIMA consideró los resultados obtenidos en los procesos de consulta en la elaboración un conjunto de medidas correctoras encaminadas a la minimización de los impactos identificados. El resultado fue un éxito, en tanto que se consiguió compatibilizar el proyecto con las demandas de la administración y población afectada. Gracias a ello, el promotor confió también en IIMA para la vigilancia durante las obras del cumplimiento de los condicionantes ambientales del proyecto.